San Cristóbal: montañas y cordialidad
Eduardo Monzón
Esta ciudad andina de Venezuela, ubicada en la región sur occidental del país, muy cerca de la frontera con Colombia, es un dinámico centro de comercio, deporte y cultura, con un agradable clima, muchos paisajes de montaña y gente muy cordial.
San Cristóbal está llena de sabores típicos de esta zona de cumbres altas, por eso no pierda la oportunidad de probar, desde su llegada, los deliciosos pasteles, panes, y la pisca andina, que conquistarán su paladar.
Algo particular de la ciudad son sus llamativos templos religiosos, puede hacer un primer recorrido por algunos de ellos, para admirar su arquitectura y aprender un poco de la historia de la capital del estado Táchira. La Iglesia San José, en la avenida Libertador, data de 1940 y maravilla con su estilo gótico.
La Iglesia Coromoto, en la carrera 17 de Barrio Obrero, tiene una fachada imponente. La Catedral de San Cristóbal está en la calle 5 con carrera 3, a un lado de la Plaza Juan Maldonado, tiene un estilo neocolonial y barroco. El templo El Perpetuo Socorro es hermoso, frente a la plaza Las Palomas. La iglesia El Ángel también es maravillosa, con la escultura de un ángel de 15 metros en su fachada.
Conozca la plaza Bolívar de San Cristóbal, con una llamativa figura, réplica del monumento a Los Héroes, en Bogotá. Si quiere conocer más de la historia de la región, diríjase al Museo del Táchira, ubicado en la avenida Universidad.
San Cristóbal también es una ciudad deportiva, siendo el fútbol el epicentro de una gran pasión colectiva, por eso hay que ir a conocer el imponente estadio de Pueblo Nuevo, que en días de partido vibra con una gran fanaticada.
Un excelente plan para aprovechar su estadía en esta ciudad, es realizar un recorrido por algunos de los hermosos pueblitos que la rodean, así podrá admirar el paisaje de San Cristóbal desde las montañas por las que pasan las carreteras.
Peribeca es un pueblo turístico muy popular, de aspecto colonial, fachadas coloridas, muchos locales para comer algo y comprar artesanía. La iglesia es espectacular, así que es un lugar que disfrutará conocer para pasar un rato diferente.
Táriba es otro pueblo cercano a San Cristóbal, tiene calles muy inclinadas, una enorme plaza, y su iglesia fue nombrada Basílica Menor, por ser un centro importante de peregrinación para la Virgen de La Consolación.
Aunque está más alejado, vale la pena que conozca San Pedro del Río, un encantador pueblo de calles empedradas donde parece que el tiempo se detuvo, tanto así que ha sido locación para producciones de televisión de época. Disfrutará recorrer sus rincones y probar la gastronomía típica que ofrecen en el lugar.
Si desea tener un contacto más cercano con la naturaleza y desconectarse de la ciudad por un rato, conocer el páramo El Zumbador será su mejor opción. Solo la vía es un regalo en sí, con montañas por doquier y un agradable clima frío. Hay Paradores turísticos para disfrutar de deliciosa comida tradicional y comprar recuerdos de un paseo encantador.
Todos son recorridos no muy distantes de la ciudad, así que siempre puede volver a tiempo para un paseo en el Centro Sambil, donde podrá seguir disfrutando de la calidez de San Cristóbal, con gente que sin duda le hará sentir como en casa.